Administrar dinero es quizás una de los puntos más problemáticos para las personas en el tema de la gestión financiera. De hecho, hice un sondeo rápido con un grupo de personas preguntándoles si entendían que administrar dinero de manera efectiva era fácil o difícil y parte importante de ellas coincidió, principalmente los hombres, en que hacerlo no es una tarea fácil.

De hecho hubo casos, dentro del sondeo, en donde algunas de las parejas matrimoniales que participaron, una de las partes asumía todo o gran parte del control de los consumos a razón de que la otra entendía que no era capaz de hacerlo de manera adecuada. No necesariamente indicando que esta decisión haya sido la correcta.

En ese sentido, nos interesa abordar el tema de la administración del dinero y cómo hacerlo de manera sencilla. Es decir, sin perder la cabeza. Con el fin de incentivar a asumir un rol más activo en la forma en que se toman decisiones relativas al uso del dinero.

¿Qué es administrar dinero?

La primera pregunta que hay que responder respecto a este tema es ¿Qué es administrar dinero? Ya que a partir de esta respuesta se podrán elaborar los principios para la gestión efectiva del mismo.

Administrar dinero, de forma resumida y sencilla, es tomar decisiones monetarias partiendo de tres niveles básicos:

1. Consumo
2. Ahorro
3. Inversión

Estos tres niveles, en el mismo orden en que se presentan, engloban todo lo que tiene que ver con las decisiones vinculadas al manejo del dinero. Y de ellos depende que el uso del recurso sea efectivo o no.

En otras palabras, en la medida en que se tengan consumo inteligente, ahorro constante y porciones de dinero capitalizables, entonces se estará administrando el dinero de una forma adecuada, pero más que todo se le estará agregando valor a la gestión financiera en general. Porque las repercusiones, al final del día, serán positivas.

¿Cómo administrar dinero de manera sencilla y sin perder la cabeza?

Tomando lo anterior como base, la pregunta que surge es cómo hacerlo de una forma sencilla y sin tener que perder la cabeza. En ese sentido, basados en que la administración efectiva de este recurso parte de las decisiones, el principio y cuestionamiento que debe primar en todo el contexto de la administración del dinero es ¿Cómo estamos decidiendo? ¿Cuáles son los parámetros que estamos utilizando para elegir qué consumir, cuánto ahorrar y qué, cuánto, cómo y dónde invertir?

Es decir, el fundamento de toda buena decisión es el análisis sobre el cual se basa, ya que en la medida en que se tengan criterios claros de por qué y para qué estoy haciendo tal o cual erogación, ahorro o inversión, entonces habrá mayores elementos de juicio a la hora de tomar una decisión financiera.

En ese sentido, es prudente tener un punto de referencia que permita elaborar estos criterios, y en este caso, la herramienta principal es la creación de objetivos. Ya que estos marcan la pauta y definen el destino de hacia dónde queremos llegar.

Si la persona, pareja, familia o empresa, se enfoca en qué lograr o alcanzar, esto le servirá, en primer lugar, como patrón de éxito o fracaso, porque, en la medida en que se hagan realidad los objetivos entonces es un indicador de buena gestión, mientras que por el contrario, sería fracaso. Y, en segundo lugar, sobre esta base es que se elaboran las estrategias necesarias para alcanzarlos.

Por ejemplo, si una persona, pareja o familia deciden ir de viaje a un pueblo del país (objetivo), tienen dos opciones para llegar, usando un vehículo (carro, avión, barco, bicicleta, animal, etc) o caminando. Por lo que en este punto, luego de haber establecido el objetivo (ir al pueblo) hace falta definir la estrategia (carro, avión, barco, etc) y, dentro de ésta estrategia la táctica (Por la carretera norte, o la sur, por el camino corto, por el camino largo, etc).

Es por esta razón que el objetivo es tan importante, porque no solamente establece un fin, sino que permite ser utilizado como indicador de éxito y permite crear la estrategia para logarlo.

Algunas pautas para lograr administrar dinero de manera fácil

En ese tenor, le sugerimos tres pautas básicas para hacerlo de una manera simple y sencilla:

• (Consumo) Enfóquese en suplir primero las necesidades y luego los gustos.
• (Ahorro) Aparte porciones consuetudinarias que le permitan tener fondos de contingencia para solventar sus diferentes compromisos.
• (Inversión) Identifique espacios potenciales para hacer que su dinero genere beneficios como emprendimientos propios o de terceros, bolsa de valores, instituciones financieras, etc.

Conclusión

Administrar dinero de manera sencilla implica tomar buenas decisiones; para ello la persona, pareja, familia o empresa debe tener criterios claros de cómo lograrlo sobre la base de objetivos que visualicen tanto el destino como la manera en cómo hacerlos realidad.

La sencillez de esto radica en que toda esta información está en la persona, familia o empresa. Es decir, los objetivos son el reflejo de aquellas cosas que se necesitan y desean y en la medida en que esto se haga tangible entonces se tendrá éxito en la gestión financiera.

Por lo que si esta entrada sobre cómo administrar el dinero de manera sencilla y sin perder la cabeza le ha sido de utilidad le invitamos a que comente y comparta, sus aportes y opiniones son de gran importancia para esta comunidad y enriquecen el debate. Y si le interesa profundizar en tema de la administración del dinero adquiera el libro Inversiones. La respuesta: Aprenda a administrar su dinero y a proteger su futuro financiero escrito por Daniel C. Goldie y Gordon S. Murray; haciendo clic en la imagen más abajo.