FINANZAS & FAMILIA
La clave para lograr una buena gestión financiera en la familia es la comunicación. En donde cada miembro(a) aporta con sus ideas a la salud financiera.
Las palabras finanzas y familia coinciden pocas veces en el núcleo de la sociedad. No es costumbre que los miembros(as) que la componen tome un tiempo para analizar y ver las realidades económicas que giran en torno al desenvolvimiento de las actividades diarias.
Esto tiene como consecuencia, en primer lugar, el desconocimiento de quienes conforman el núcleo y, en segundo lugar, la falta de un criterio uniforme a la hora de tomar decisiones, que coadyuven a un buen desempeño financiero familiar. Por esta razón es necesario hacer un cambio en los paradigmas que rigen la participación de todos en los asuntos económicos domésticos.
En ese sentido la palabra clave es: comunicación; sin ella es imposible lograr una buena gestión financiera familiar; y para lograr esto deben incidir todos los componentes necesarios para que sea efectiva.
Cuando convergen estos tres elementos (emisor, mensaje y receptor) traen a colación dos puntos altamente relevantes para el éxito; el primero es la existencia de una información que transmitir por parte del emisor, es decir, dentro del núcleo se dan situaciones económicas que afectan todas las actividades, tanto individuales como comunales de la familia; por lo que es de vital importancia crear un ambiente de confianza y distención para fomentar el deseo de compartir dicha información.
El segundo elemento es la receptividad ante las informaciones que se transmiten. Con esto se plantea que sin importar el contenido, afecta al todo, por ende a las partes. De manera que es prudente mantener una actitud abierta y de comprensión. Esto no quiere decir que haya ausencia de métodos correctivos, sino que, ante una determinada situación que adverse, es mejor tener una posición de búsqueda de soluciones a una de señalamiento de culpables.
Por lo tanto, dé el primer paso hacia una economía doméstica saludable, en donde prime la comunicación fluida con el único fin de alcanzar el bien común, que es el crecimiento familiar.
Deja un comentario