El objetivo financiero de toda empresa es generar utilidades; esto se da cuando al final de cada período, se tienen buenos resultados. Sin embargo, aún estos últimos sean positivos no necesariamente significa que sea  un negocio rentable. Existen otros elementos que inciden en la rentabilidad de un negocio; por lo que, no solamente se debe enfocar en generar excedentes. Un negocio es rentable cuando logra satisfacer expectativas.

Negocio Rentable

Rentabilidad es la capacidad que tiene algo para generar suficiente utilidad o ganancia[1]. En otras palabras, es el margen de beneficio esperado por los accionistas, que debe ser suficiente. Existen tres factores que inciden en la determinación de dicho margen; cuando estos son satisfechos es cuando se puede hablar de un negocio rentable.

En primer lugar el costo de producción; este punto trata de todo aquello que está relacionado en llevar a la realidad algún producto o servicio para su comercialización. Para tener un negocio rentable es determinante establecer ejecutorias estratégicas que permitan generar valor durante todo el proceso productivo; de manera que se logren tener costos optimizados sobre la base de la calidad en cada etapa de producción.

En segundo lugar está el mercado. Un negocio rentable es aquél que va a la par con las tendencias; más allá de lo que se quiera obtener como beneficio, el mercado marca la pauta a la hora de establecer dicho margen. Se hace necesario ir acorde a él, ya que si dentro de éste existen varias opciones y la suya las excede o bien es inferior, entonces, es cuesta arriba competir.

En tercer lugar está la expectativa; representa el deseo de retorno en inversión de quien ha financiado dicho negocio. Al final del día un negocio rentable busca la generación de beneficios que sean suficientes para suplir las necesidades de quien capitaliza el proyecto.

Cuando se satisfacen cada una de estas tres expectativas es cuando se tiene un negocio rentable. Ahora, el reto de cada emprendedor(a) es optimizar los recursos disponibles para enfocarlos hacia la rentabilidad del negocio. En otras palabras, el mayor esfuerzo debe estar dirigido a hacer que sea un negocio rentable, a través de aquellas ejecutorias que estén apegadas a la planeación. La rentabilidad determina la continuidad del proyecto, cuando estas expectativas no son satisfechas entonces el sentido del negocio se pierde.

Pautas para lograr tener un negocio rentable

1. Elabore un plan estratégico: Es definir qué se quiere alcanzar y cómo hacerlo. En este se describen tanto los objetivos como los requerimientos necesarios para desarrollar la visión general de la empresa. Esto es vital para tener un negocio rentable. Sin él probablemente se estén empleando esfuerzos hacia una causa perdida.
2. Optimice los recursos: No malgaste, mal invierta o mal utilice los recursos que tenga a la mano. Trabaje para la eficiencia, implementando programas destinados a maximizar todo aquello a lo que tiene acceso. Tenga pendiente que el objetivo es logra que el negocio sea rentable.
3. Invierta en su proyecto: El crecimiento de un negocio está vinculado de manera directa a la inversión que se haga en él. Cuando se interioriza la importancia de capitalizar y cómo esto influye en la rentabilidad del negocio, entonces, se emplean estrategias relativas a ello. Por lo que el negocio rentable es aquel que se dinamiza a través de la inversión.