Autor(a): Freepik Bajo licencia CC con modificaciones

Los seres humanos somos entes de hábitos. Todos tenemos una rutina; nos manejamos por parámetros que marcan y definen nuestro accionar en la vida. Es usual que tengamos un checklist o listas de comprobación, escrita o mental, en donde de manera automática, vamos desarrollando sus diferente actividades diarias; y estas definen nuestro comportamiento.

A todo esto, existen hábitos que no necesariamente nos aportan valor. Por ejemplo, si cada vez que nos levantamos en la mañana ingerimos una bebida gaseosa, en el largo plazo, esto tendrá un efecto negativo en nuestra salud. De hecho tengo un amigo que solía hacer esto y sus riñones no se lo agradecieron en lo absoluto. Al igual que otras tantas que pudiéramos listar.

En ese sentido, y aplicando el concepto de hábitos que aporten, quiero facilitarte una rutina financiera que te permita tener una mejor gestión del dinero. En donde se tomen en cuenta aspectos relevantes para que exista un equilibro en toda la estructura económica personal, dando como resultado un desempeño financiero acorde a tus expectativas personales.

En esta entrega vamos a desglosar los siguientes temas:

La importancia de tener una buena rutina financiera

Tener una buena rutina financiera, sin lugar a dudas, es un beneficio para toda aquella persona que busca tomar el control de sus finanzas. Ya que a través de un sistema sano de gestión del dinero logrará agregar valor a toda la estructura económica personal.

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En ese tenor, la importancia de tenerla se resume a dos elementos básicos:

1. Control
2. Orden

¿Por qué estos dos elementos? Porque en la medida en que la persona esté en control de su dinero y plantee un orden en su accionar financiero, entonces podrá tomar mejores decisiones. Es decir, tener el control y orden en tu dinero es sinónimo de saber qué vas a hacer y cuándo hacerlo. De manera que tener un mapa que marque la pauta es de alta relevancia en tu gestión financiera.

Elaborar una buena rutina financiera

Por lo general cuando pienso en rutinas llegan a mi memoria los gimnasios que, aunque he estado en varios, no he tenido mucho éxito en ellos, no obstante, si tengo vigente en mi mente la importancia de llevar a cabo al pie de la letra la rutina de ejercicios asignada por el instructor, con el fin de lograr los efectos deseados.

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Por lo tanto, al traer al mundo de las finanzas el tema de las rutinas es válido precisar que el éxito de llevar esta u otra acción habitual está en la consistencia y disciplina, porque lo rutinario de tal o cual cosa se resume en repetición.

Por lo que, cual gimnasio, para ejercitar la gestión financiera personal se requiere de varias repeticiones de las rutinas que te voy a proveer. Y, aunque durante el trayecto haya uno que otro percance, no importa, eso es parte del proceso. Lo importante es el enfoque hacia lograr un hábito saludable en el tema financiero. Y que todo esto resulte en un mejor desempeño en la administración del dinero.

Rutina financiera No. 1: Registro de gastos

Sin duda alguna, la rutina más importante que debes llevar a cabo, con muchas repeticiones, es la de registrar tus gastos. Hacer esto es sinónimo de los dos elementos básicos de todo el concepto de las rutinas financieras: Control y orden.

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Para esto, por lo general sugiero auxiliarse de algún tipo de aplicación u hoja electrónica que le permita llevar de manera más organizada el registro de todos tus gastos. Y, como he planteado en entradas anteriores, existen un sin número de aplicaciones disponibles en el mercado. Solo basta con escribir en Google la frase aplicaciones financieras, y los resultados de la búsqueda serán prácticamente incontables.

O bien desde cualquiera de las tiendas de aplicaciones de nuestros celulares inteligentes para que aparezcan una infinidad de aplicaciones y hojas de cálculo especializadas en el registro y gestión financiera. Y de estas hay tanto pagas como gratis.

Pero, también estoy consciente de que no a todas las personas esta opción le es viable, ya sea porque no están buscando algo tan sofisticado, o bien porque prefieren escribir en papel.

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Ahora, independientemente de la razón que tenga para una u otra opción, lo que debes procurar es establecer algún tipo de sistema de registros de tus gastos, para que así tengas toda tu vida financiera en control y orden.

Y estos registros incluirán cada una de las transacciones que se hagan con dinero. Desde el gasto más mínimo hasta el más encumbrado. Ya que cada uno de ellos representa una erogación, por lo tanto, forman parte de tu estructura financiera.

Rutina financiera No. 2: Evaluación de desempeño financiero

La segunda rutina financiera va muy de la mano con la primera, porque se soporta tanto de los registros como del presupuesto. Estoy hablando de la evaluación del desempeño financiero. Es decir, determinar si lo que se está llevando a cabo va acorde a lo que se planeó.

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Para esto, en principio, te sugiero que lo hagas semanalmente, para luego pasar a cada quince días y luego mensualmente. Ya que lo que se está buscando es crear el hábito, por lo tanto, cuando lo haces de manera gradual, para que vayas asumiendo el ritmo de evaluación.

En esta evaluación lo que vas a identificar son las variaciones que has tenido entre lo que dice tu presupuesto que debes gastar en tal o cual cosa y lo que realmente gastaste. Esto tendrá tres posibles resultados:

1. Mayor a lo planeado
2. Igual a lo planeado
3. Menor a lo planeado

Independientemente de cuál sea el resultado (Mayor, igual o menor) lo importante de todo este proceso es responder a una pregunta “¿Qué pasó?” es decir “¿Por qué tuve tal o cual gasto mayor a lo planeado, o menor a lo planeado? Y de la respuesta a esta pregunta entonces debes hacer un análisis en donde tendrás que ver si fue justificado o no tal incremento o decremento en el egreso. Para entonces hacer los ajustes de lugar, ya sea en la planificación (modificar el presupuesto) o en la ejecución (identificar alternativas de gastos que sean más apropiadas para la buena gestión financiera).

Rutina financiera No. 3: Ahorrar

La tercera rutina financiera es quizás la que presente un mayor reto; porque implica dos factores primordiales para que pueda llevarse a cabo:

1. Gastar menos de lo que se ingresa.
2. Disciplina y consistencia
   

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Estos elementos son vitales, porque sin ellos es cuesta arriba llevar a cabo el proceso de ahorro. Ya que, al igual que el gimnasio no funciona sin una buena dieta, el funcionamiento adecuado del ahorro viene como resultado de tener un gasto ajustado al ingreso y tener la disciplina y consistencia para mantenerlo.

En ese sentido, ésta encuentra éxito, como las demás, en la práctica. Para ahorrar hay que ahorrar. Es decir, apartar porciones de manera consuetudinaria, sin importar el monto. Y repetir esta acción hasta que el “musculo financiero del ahorro” quede tonificado; esto es, que el ahorrar se convierta en una acción natural para ti.

Conclusión

Tener una rutina financiera adecuada forma parte del éxito que puedes tener en tu gestión financiera personal. Llevarla a cabo requerirá de un esfuerzo de tu parte y debes saber que, al igual que un proceso de ejercicios, los resultados no se ven de la noche a la mañana. Toman tiempo, pero, sin duda alguna, serán de mucha satisfacción.

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Por lo que, si esta entrada sobre ¿Cómo tener una rutina financiera? Te ha sido de utilidad, te invitamos a que comentes y compartas. Tus opiniones y aportes son de gran importancia para esta comunidad y enriquecen el debate. Y si te interesa profundizar en el tema, te sugerimos adquirir el libro GimnasiaFinanciera.com: 7 hábitos para mejorar tu economía en 7 días escrito por Javier Rivero-Diaz haciendo clic en la imagen más abajo.