¿CÓMO UTILIZAR LA TARJETA DE CRÉDITO DE MANERA INTELIGENTE?

En este mundo copado de tecnologías es prácticamente imposible desvincularse de la palabra “inteligente”. En varias ocasiones la he utilizado, y al parecer tiene una conexión interesante. Es por esto que en Finanzas & Proyectos quiero tratar el tema Cómo usar la tarjeta de crédito de manera inteligente, con el objetivo de brindarte las pautas necesarias para que tengas un buen desempeño financiero con ella.

La importancia de saber cómo usar la tarjeta de crédito

Hasta ahora, son pocas las personas que vienen a mi consulta que no tienen una tarjeta de crédito. De hecho, una de las principales causas por las cuales mis clientes buscan de mi asistencia es por temas relacionados a un manejo inadecuado de este tipo de endeudamiento.

Tomando esto en consideración, saber cómo utilizar la tarjeta de crédito, basado en la experiencia y en algunas estadísticas que reflejan la manera en que estas inciden en los problemas financieros personales, entonces es de suma importancia saber cómo usarlas. Porque estas pueden ayudar o bien lacerar la calificación en el buró de crédito.

Y una de las principales causas de problemas en el uso de este instrumento es el financiamiento del mismo, la manera en cómo cobran los intereses las tarjetas de crédito. Ya que representan los de mayor carga financiera en el mercado formal. En otras palabras, y para ponerlo de manera simple y sencilla, es más caro financiar una tarjeta Visa, tarjeta Mastercard o cualquier otra, a financiar una vivienda o un vehículo.

¿Cómo manejar una tarjeta de crédito correctamente?

Partiendo de la importancia que tiene saber cómo usar la tarjeta de crédito, y las implicaciones en la financiación de estos créditos personales, entonces la pregunta lógica es cómo manejar una tarjeta de crédito correctamente. Es decir, de qué manera puedes hacer del dinero plástico un aliado y no un enemigo.

Para esto tienes que posicionarte desde la perspectiva correcta. Y lo primero que tienes que interiorizar es que se ubica dentro de la categoría de préstamos personales; por lo tanto, lo único más costoso es términos de financiamiento son los prestamistas particulares, que facilitan créditos rápidos pero a una tasa exorbitante, respecto de cualquier otro instrumento en el mercado.

Mientras que en segundo lugar debes asumirla como una responsabilidad. No como un premio o bono que ganaste porque llenaste un formulario. Todo lo contrario, es un compromiso que acuerdas con una entidad financiera, en este caso un banco de crédito, en donde accedes a recursos para satisfacer necesidades y deseos de consumo personal.

Pautas usar inteligentemente una tarjeta de crédito

Luego de haber tocado la importancia de saber cómo usar una tarjeta de crédito, en esencia por las repercusiones que pudiera tener, y ver que manejar el crédito correctamente debe partir desde dos perspectivas: 1- Un instrumento costoso y 2- Una gran responsabilidad.

Quiero compartir contigo algunas pautas que te permitan tener un uso inteligente de este instrumento. En otras palabras saber como usar una tarjeta por primera vez, o bien si ya tienes una,  enderezar cualquier tipo de mala práctica financiera que hayas tenido con este crédito personal.

Es importante resaltar que estas pautas lo que buscan es que tengas un buen desempeño financiero, que se resume a tomar buenas decisiones. Si logras implementarlas entonces tu manejo del dinero será distinto; uno en donde le aportas valor no solo a tu flujo de efectivo, sino también a tu imagen crediticia con las instituciones comerciales y financieras.

Utiliza la tarjeta para asuntos puntuales

Dentro del contexto de la gestión de deudas, y en este caso en particular, el manejo de las tarjetas de crédito, la estrategia principal es utilizar este instrumento de manera puntual. Es decir, no usarla para todo lo que tienes que consumir, sino para cosas específicas.

En otras palabras, si tienes un vehículo, puedes tenerla para combustible y no para el regalo de boda de la prima que se casa el próximo mes. Esto por una razón muy básica: control. Cuando incorporas a tu estructura financiera criterios claros de gestión, entonces tu manejo del dinero será efectivo.

Ya que no incurrirás en gastos no planificados, y menos, en deudas innecesarias. Recuerda siempre que la tarjeta de crédito no es un premio ni un regalo o un bono que te sacaste en la empresa. Es un financiamiento a corto plazo; con tasas de interés sumamente altas y que repercute de manera directa en el buró de crédito.

Te presente las fechas importantes

Luego de tener claro la importancia de utilizarlas para asuntos puntuales, otro elemento clave en la buena gestión y que incide en cómo utilizar la tarjeta de crédito de manera inteligente, es cuando tienes presente las fechas relevantes, que son la fecha de corte y de límite de pago.

¿Qué es la fecha de corte y la fecha de pago?

Estas dos fechas representan dos realidades distintas. La primera (fecha de corte)  representa el límite que agrupa el total o cúmulo de transacciones dentro un período determinado. Es decir, en un rango, digamos, de veinticinco a treinta días, todo lo que hagas con tu tarjeta de crédito queda registrado, y es el soporte para elaborar el estado de cuenta que tienes que pagar.

Mientras que, la fecha límite de pago es el último día en que puedes saldar los diferentes consumos que hayas hecho, durante el período de tiempo que estuviste consumiendo con el dinero plástico que está representando por la fecha de corte.

En español, la fecha de corte crea el estado de cuenta y la fecha límite de pago es el último día en que puedes pagar lo que dice el estado que debes. Esto ha traído ciertas interrogantes como ¿Qué pasa si pago antes de la fecha de corte? O ¿Qué pasa si compro el día de mi fecha de corte? Y la respuesta general para ambas, y otras tantas que puedan surgir es: Espera que se genere tu estado de cuenta, y paga antes de la fecha límite de pago. Si haces esto, tendrás buenos resultados en tu manejo del plástico.

En otras palabras, si te preguntas ¿Puedo pagar mi tarjeta de crédito antes de la fecha de corte? La respuesta es sí, pero nuestra recomendación es que esperes a que tengas un monto definido por tu estado de cuenta y evita hacerlo después de la fecha límite de pago, para que no sufras las penalidades de los intereses y las moras por pago tardío.

Paga a tiempo y completo

Aunque ya cubrimos una parte vinculada a esto en el apartado anterior sobre las fechas importantes. No obstante, esto debe ser una pauta para ti. Ya que en la medida en que pagues a tiempo y completo, estarás cumpliendo tu parte del acuerdo con el banco y te evitarás las penalidades propias del sistema financiero.

Y lo más importante de esto es el pago de contado tarjeta de crédito, ya que una de las prácticas que suelen tener quienes mal manejan este recurso es pagar una tarjeta con otra. Es decir, tener varios plásticos y como se retira dinero de un cajero automático, la persona salda con lo extraído de una el saldo de otra.

Pero esto es una práctica que solo durará por un tiempo, porque lo que realidad se está pasando es un sobre endeudamiento. Una bomba de tiempo a punto de estallar. Por lo tanto, tienes que hacer el esfuerzo por hacer realidad el pago total tarjeta de crédito, para que lleves la fiesta en paz con la entidad que la emitió a tu favor.

No tengas tarjetas de crédito extras

Por último, y quizás una de las pautas primarias a las que debes prestar atención si quieres saber cómo utilizar la tarjeta de crédito de manera inteligente es no tener extras. Esto se traduce en que debes tener las necesarias. Y honestamente te sugiero que solo tengas una.

Tener una sola es una gran responsabilidad; más de ahí se puede tornar en un problema; porque se puede caer en lo que planteamos en el subtítulo anterior, su utilización como dinero extra, como excusa para saldar la principal o bien para sobreendeudarse. Algo que no es cierto.

El límite de dinero que te aprobaron no se adiciona a lo que ingresas mensualmente, todo lo contrario, te resta de tu flujo de efectivo y limita tu rango de acción de ingresos, porque al final del día lo que estás haciendo es endeudándote. Por lo tanto, mi sugerencia es que no tengas más de una, pero si entiendes que puedes manejarte con dos o más, entonces se prudente en tus movimientos y evita la sobreutilización.

Conclusión

Saber cómo utilizar la tarjeta de crédito de manera inteligente se reduce a darse cuenta que es una gran responsabilidad. Que no es algo que se debe usar a la ligera, sino que debe estar relacionado a aquello que le aporta valor a tu gestión financiera personal.

Eso hace que el manejo de este recurso sea prudencial, tomando en consideración que debes utilizarla para asuntos puntuales, teniendo presente las fechas importantes (fecha de corte y fecha límite de pago); pagar a tiempo y teniendo la cantidad necesaria de plásticos.

En ese sentido, si esta entrada te ha sido de utilidad, te invito a que comentes y compartas. Y si te interesa profundizar en este tema, adquiere el libro En el Nombre de Comprar, Firmar… y No Llorar escrito por María Antonieta Collins haciendo clic en la imagen más abajo.