TRES TIPOS DE DINEROS QUE NO PUEDEN FALTAR EN TU GESTIÓN FINANCIERA

He tenido el privilegio de servir a varias personas en el manejo de sus finanzas personales. Usualmente vienen a mí a razón de problemáticas financieras, y he llegado a la conclusión, luego de analizar las diferentes realidades de mis clientes, de que toda persona debería tener tres tipos de dineros, los cuales definen la estabilidad y sostenimiento financiero. En Finanzas & Proyectos te hablo sobre cómo puedes tenerlos dentro de tu flujo de efectivo.

Entendiendo los tres tipos de dineros

Probablemente una de las preguntas que te puedes formular es ¿De qué rayos me estás hablando? ¿Qué es eso de tener tres tipos de dineros? y para responder a esto tenemos que centrarnos en dos elementos básicos de la gestión financiera personal: 1- Decisiones y 2- Objetivos. Esto quiere decir, que cuando no etiquetas tu dinero sirve para todo y para nada al mismo tiempo.

Esta dualidad propicia la improvisación, que se torna en un peligro. Porque invita a que uses el dinero, no en función de objetivos sino de deseos, usualmente, momentáneos. Ahora, es importante resaltar, ya que esto se puede malinterpretar, que cuando los que hablamos de finanzas decimos esto, algunas personas pueden asumir cosas erróneas. Porque parece más una carga a una solución; y que no es sostenible en el tiempo.

En ese sentido, cuando hablamos de dinero etiquetado no es que literalmente tomas un adhesivo y lo pones en tus billetes; aunque hay personas que clasifican su dinero hasta en sobres, y es una manera de plantearse un cierto nivel de control. No obstante, cuando te hablo de etiquetarlo me refiero a que debes manejarlo conforme a un presupuesto, que le da propósito y destino a tus recursos.

Los tres tipos de dineros que debes tener

Partiendo de que estos representan estabilidad y sostenimiento financiero, los tres tipos de dineros que debes tener en tu gestión financiera se originan de la forma en que distribuyes tu dinero y cómo lo optimizas para que pueda darte mejores rendimientos.

Esto es clave, porque si distribuyes las clases de dinero que tienes en función de lo que te aporta valor entonces tendrás, sin lugar a dudas, un mejor desempeño en la gestión de tus finanzas personales. No que te vas a hacer rico millonario, sino que tus recursos trabajarán para facilitarte la vida, y no complicártela.

En ese sentido, la elaboración de esta estrategia financiera debe encausarte hacia dos cosas básicas:

1- Control en tu gestión financiera

2- Jerarquización de tus decisiones en función del manejo de tu dinero.

Para eso, aquí te listo los tres tipos de dineros que no pueden faltar en tus finanzas personales, y por los que deberías trabajar hasta que se materialicen en tu flujo de efectivo.

Dinero No. 1: Ahorro

El primer dinero que seguro debes tener en tu gestión financiera, y que no debería faltar,  es el ahorro. Ya que es la evidencia tangible de que te estás manejando en función de tus posibilidades. Esto porque el ahorro sale de la diferencia entre los ingresos y egresos, lo que significa que estás gastando menos de lo que estás ganando.

Para llegar a este punto, evidentemente, tienes que gastar menos de lo que ganas, y para eso, lo primero que tienes que hacer es establecer un sistema de prioridades en tus gastos. Identificar qué cosas de las que estas gastando (servicios, consumos, artículos, etc.) realmente valen la pena. Y la manera en que encuentras respuesta a esto es preguntándote a ti mismo(a) qué realmente es importante en tu vida.

Esta pregunta sugiere dos cosas: 1- Que existen cosas que no son importantes y 2- Existen cosas que son prescindibles. Lo que significa que, no en todo lo que gastas tu dinero es relevante a tu vida y que puedes dejar de hacerlo. En ese sentido, para que puedas tener el primer tipo de dinero cubierto, identifica qué cosas son realmente son relevantes en tu vida y desecha las que no, para que tengas espacio para el ahorro.

Dinero No. 2: Fondo de emergencia

El segundo tipo de dinero que no debe faltar en tu mesa financiera es el fondo de emergencia. Este, aunque es un tipo de ahorro, no tiene la misma connotación. Ya que lo que busca es suplir en un momento de falta de liquidez. Es como ese seguro médico que usas para aminorar la carga financiera en tu salud.

Este se forja sobre la base del tiempo, y debe cubrir tus gastos importantes por un período de 3 a 6 meses. Pero, como puedes ver, cubrir este período en corto tiempo no es tan sencillo. Porque implicaría un gran esfuerzo de parte tuya. Por lo que, la manera en que puedes hacerlo es a través de cuotas pequeñas fijas durante un periodo mayor.

Para que se entienda, imagina que tienes que ahorrar $60  en tres meses. Eso sería $20 por mes (20 x 3=60) sin embargo si llevas eso a un año, solo tendrías que esforzarte en apartar $5 cada mes, y en cuestión de 12 meses estarías cubriendo ese fondo de contingencia (5 x 12=60). Por lo tanto, define qué es importante en tu vida, y en función de ello establece esa cuota que te permitirá materializarlo, para que se haga una realidad.

Dinero No. 3. Inversión

El tercer tipo de dinero que seguro debe estar en tu «carpeta financiera» es el de las inversiones. No existe una manera más rápida y eficiente para que tu dinero crezca distinta a la capitalización de proyectos, tanto personales como de terceros.

En ese sentido, debes tener presente que este tipo de acciones se enfocan en dos tiempos, largo y corto plazo. Las primeras buscan acumular dinero, mientras que las segundas en la liquidez. Es decir, si lo que estas buscando es llegar a una meta «X» multiplicando tu dinero, entonces el largo plazo es tu opción. Mientras que si necesitas solventar cosas del día a día, entonces tus inversiones deben ser en centrada al corto plazo.

A todo esto, debes saber que la capitalización va a estar relacionada a tu perfil de inversión. El cual define todo el engranaje de los pasos que tienes para materializar tus planes. Por lo tanto, tienes dos tareas primarias: 1- Crear las bases financieras (ahorrar dinero) para invertir y 2- Tener bien claro tu perfil de inversión.

Conclusión

El éxito en la gestión financiera parte de tomar buenas decisiones, para tener buenos resultados. Y dentro del contexto del manejo del dinero, hay cosas que no pueden faltar, que he etiquetado como «dineros». Los cuales te permiten, no solo tenerlo, sino que promueven la estabilidad financiera personal. Estos se engloban en tres:

1. Ahorro
2. Contingencia
3. Inversión

Cuando logras tener a disposición estos tres elementos, sobre la base de una planificación, entonces creas estabilidad financiera. Te estás ayudando, como dicen los gringos, «Big Time»

Por lo tanto la invitación es a que hagas lo posible por tener estos tres tipos de dineros, dentro de tu gestión financiera personal. En ese sentido, si te interesa entrar más de lleno en la buena administración del dinero adquiere el libro La transformación total de su dinero escrito por Dave Ramsey. Y te invito a comentar el formulario y compartir esta información en tus redes sociales y correo electrónico.