¿QUÉ ES UNA INCUBADORA DE NEGOCIOS Y CÓMO ACCEDO A ELLA?
Las incubadoras de negocios pueden ser una alternativa viable o factible para quien tenga un proyecto comercial.
Emprender no es una tarea sencilla. Por lo general implica mucho trabajo, esfuerzo y dedicación. Como no todo el mundo coincide con estas tres características, entonces la tasa de negocios que cierran durante los primeros cinco años es alta. Sin embargo hay alternativas, y entre ellas la de espacios para hacer crecer el negocio. Hoy en Finanzas & Proyectos respondo a la pregunta ¿Qué es una incubadora de negocios? Pero mejor aún te muestro cómo acceder a ella.
¿Qué es una incubadora de negocios?
Empecemos respondiendo a la pregunta inicial y objetivo de esta entrada ¿Qué es una incubadora de negocios? Se puede contestar de diferentes perspectivas pero en esencia son espacios en donde se facilita el emprendimiento.
Digamos que son “factorías” de nuevos proyectos, los cuales, durante un tiempo determinado auxilian con condiciones favorables a emprendedores que inician sus ideas comerciales y que requieren de espacio, dinero, asistencia logística, capacitación, etc.
En otras palabras, cuando hablamos de incubadora de empresas, a lo que nos referimos es a entidades (comerciales o no) que se dedican a dar vida y sostenimiento a nuevos emprendimientos. De manera que puedan mantenerse con vida. Exactamente igual a las que vemos en los centros médicos en las zonas de recién nacidos. Un espacio en donde las condiciones son favorables para la transición del vientre de la madre al mundo exterior.
Pautas para acceder a una incubadora de negocios
Tomando en consideración qué son y cuál es su función, lo que toca ahora es determinar qué hay que hacer para acceder a ellas. En otras palabras, cuáles son los requerimientos para formar parte de una incubadora, pero más aún, dónde se encuentran.
Estos espacios, aunque existen privados, por lo general, la mayoría son gubernamentales. A razón de que, como parte de las políticas de Estado, lo que se busca es generar más ingresos por los impuestos, pero más que todo, que se dinamice la economía a través de la creación de nuevos bienes y servicios, a través del comercio y la generación de empleos.
En ese sentido, los diferentes gobiernos, unos en mayor proporción que otros, buscan dar facilidades para la creación de empresas. No obstante, existen incubadoras privadas, lo único es que la tendencia de ellas es buscar participación dentro de la empresa naciente con acciones, ya que puede ser insostenible en el tiempo, mantenerse facilitando a proyectos nuevos. A todo esto, aquí te presento algunas pautas para que entres al mundo de las incubadoras de empresas.
Elabora un plan de negocios
Cada incubadora de proyectos tiene sus requerimientos que de igual forma se ajustan a lo que están buscando o al tipo de rama de negocios a la que se dedique (industrial, comercial, tecnología, etc). Sin embargo el elemento común a todas es que requieren de quien emprende la elaboración de un plan de negocios.
Este no tiene que ser un megacompendio que hable de la situación mundial o global. Es más que todo un resumen que explica en qué consiste el proyecto, cuáles son las expectativas a futuro, las condiciones de mercado que favorecen este tipo de iniciativa, qué vas a hacer para alcanzarlas, y cuál es la inversión que se requiere.
De manera que se tenga esa panorámica general de lo que tiene que tiene que ver con tu emprendimiento. Toma en cuenta que hay detalles que estoy omitiendo, sin embargo, a groso modo, estos son los aspectos básicos que debes tocar en tu proceso de elaboración del plan estratégico de tu emprendimiento. Si necesitas una profundización de esto, puedes adquirir el libro PLAN DE NEGOCIO: Cómo diseñarlo e implementarlo haciendo clic en la imagen más abajo.
Identifica el tipo de Incubadora para tu proyecto
Luego de elaborar el plan de negocios, tienes que hacer un proceso de identificación del tipo de incubadora de negocios que se ajusta a tu tipo de proyecto. Usualmente, y te voy a ser muy honesto, este tipo de espacios tiene un enfoque mayor en el tema industrial.
En otras palabras, imagínate que quieres tener un negocio de consultoría. Si vas a una de estas aceleradoras de negocios, como el modelo es algo que se puede llevar a cabo, literalmente, desde una computadora, entonces no es algo que suele llamar la atención.
De hecho, la característica principal de ellas es que aceptan negocios escalables, que quiere decir, que puedan crecer y desarrollarse a escalas relevantes para la nación. Es por esto que los gobiernos se enfocan en ellas, porque tienen la capacidad, por ejemplo, de adquirir una gran nave industrial a un precio más económico y con facilidades de financiamiento, y en esta nave incluir varios proyectos simultáneos, de manera que sea rentable.
Pero no solamente eso, sino que el mismo Estado, como incentivo para que arranque bien el proyecto, suele convertirse en el primer cliente, y si es así, entonces la empresa que se instale en este tipo de modelo debe tener la capacidad de darle respuesta al Gobierno en términos del producto o servicio que ofrece.
Céntrate en aportar valor
Por último, aunque no tienes que tener una idea que revolucione al mundo, ni que haga que los carros vuelen, sí debe ser un emprendimiento que aporte valor. En otras palabras, que supla realmente una necesidad. De lo contrario, acceder a las incubadoras de negocio será una pérdida de tiempo. No porque tu idea no sea buena, sino porque no se ajusta al modelo que promueve.
Para saber si tu idea aporta valor, analiza si responde a una necesidad puntual y perpetua de la gente. Por ejemplo, aunque los cines son una realidad y mucha gente va a ellos, no responden a una necesidad recurrente; sino a una eventual y para un público determinado.
En ese sentido, cuando pasas tu idea por el cedazo de las necesidades, y el resultado es favorable, entonces puedes ponderar acceder a una incubadora de nuevos proyectos. De lo contrario, existen otras alternativas a espacios que te puedan ayudar con tu idea de negocios. Como los inversionistas ángeles, el crowdfunding, etc.
Conclusión
Dentro del contexto del emprendimiento, las incubadoras de negocios pueden ser una alternativa viable o factible para quien tenga un proyecto comercial. En ellas puedes encontrar apoyo en términos de capacitación, espacio, financiamiento y otras tantas áreas que enriquecen el desarrollo de tu idea.
Estas por lo general son desarrolladas por gobiernos y buscan, entre otras cosas, dinamizar la economía y promover el empleo. Aunque existen incubadoras privadas que también pueden serte de utilidad. Para que puedas acceder a ellas debes tener en cuenta lo siguiente:
- Elaborar el plan de negocios
- Identifica el tipo de incubadora para tu proyecto
- Céntrate en aportar valor
A través de la una buena combinación de estos tres elementos, tendrás un desempeño financiero adecuado para tu proyecto. Y si esta entrada te ha sido útil, y crees que le puede pasar igual a otra persona, pues compártela en tus redes sociales y vía correo electrónico. Y si te interesa profundizar en el tema. Te reitero adquirir el libro ¿Funcionará Mi Idea? Escrito por Víctor Espigares haciendo clic en la imagen más abajo.
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