¿CÓMO AHORRAR EN LA COMIDA?
Ahorrar dinero en la comida está relacionado a decisiones de consumo. Pero más a la salud. Cuando la prioridad es estar sano, por defecto, ahorras dinero en comida.
Una de las partidas de mayor peso en la gestión financiera es alimentación. Por lo general ocupa entre el 40% y el 60% de todo el presupuesto personal o familiar. Dada la relevancia que tiene, en Finanzas & Proyectos te brindo algunas pautas sobre ¿Cómo ahorrar en la comida?
La importancia de comer saludable
Antes de entrar en materia con esto de responder a ¿cómo ahorrar en la comida?, quiero resaltar la importancia que tiene comer saludable. Más allá del dinero que puedas evitar gastar. Lo más importante para la vida es la salud; porque sin ella no hay vida.
Por lo tanto, de entrada te digo que la clave principal para cómo gastar menos en comida es teniendo una estructura alimentaria saludable. Aquella que se enfoca en nutrirte; en otras palabras, proveerte de lo que necesita tu cuerpo y no necesariamente de lo que quieres.
Por tal motivo, al compartir estas pautas quiero que tengas en mente que el objetivo que debería primar, independientemente del resultado que se logre en tu bolsillo, es vivir en salud; y que esto se torne en un ciclo de comer saludable y ahorrar dinero, que a la larga redundará en un mayor disfrute y optimización de tus recursos económicos.
Pautas para cómo ahorrar en la comida
La manera en que sabemos cómo ahorrar en la comida, es en la forma en que manejas tu dinero. Es decir, de las decisiones de compra que tomas en el día a día. Las cuales se encausan en función de tus necesidades, deseos y aspiraciones.
Por lo tanto, a la hora de identificar aspectos relativos a ahorrar en la comida, lo primero que tenemos que partir es de que tú y solo tú tienes la decisión de gastar tu dinero en aquello que realmente te aporta salud. Algo que no se limite a estándares sociales de belleza, sino a que tu cuerpo funcione bien.
En ese sentido, estas pautas se centran en estrategias y formas en las que puedes tomar provecho de los recursos disponibles tanto en donde compras como en las herramientas que utilizas para ello.
No. 1: Visita a tu médico
Lo primero que tienes que hacer para saber cómo ahorrar en la comida es invertir en un proceso de evaluación médica. Recuerda que el objetivo supremo de esto es estar en salud, y quien sabe de salud es el médico.
Por lo tanto, agenda una cita con un(a) médico(a) especialista en nutrición para que te evalúe e indique qué cosas debes hacer para tener una alimentación saludable.
Para algunos, esto puede parecer un «gasto innecesario» a razón de que tío Google está ahí y puede recetar el sistema mágico de nutrición. El problema con nuestro «tío resuelve todo» es que te muestra información que no necesariamente se aplica a ti. Y que si se lleva de manera inadecuada te puede hacer mucho más daño que bien.
En ese sentido, evita problemas y visita a tu médico para que te prescriba un sistema ajustado a la realidad de tu cuerpo; que te permita comer saludable y que eso se traduzca en un ahorro en la comida. De hecho, te recomiendo seguir de las cuentas más entretenidas, dinámicas y serias de nutrición, la Dra. Taina Ubiñas en Twitter; estoy seguro que te será de mucha utilidad.
No. 2: Evita comprar comida en el trabajo
Uno de los factores que mayor incide en el gasto de comida es cuando lo hacemos desde del trabajo. Es probable que haya algún comedor, cafetería, etc. o una empresa que las venda, y por la facilidad que provee de tomarla a crédito y no tener que cocinar se convierte en una opción para la empleomanía de cualquier empresa.
Sin embargo, cuando lo ponemos en números, y comparamos lo que te cuesta hacerla en tu casa y llevarla respecto de comprarla, en lo único que ahorras cuando la compras es en hacerla. Después de ahí, no hay mayores beneficios..
Hice un análisis de esa diferencia y, en el experimento que realicé, comprarla en el trabajo te cuesta entre 45% y 60% más que hacerla en tu casa. En ese análisis incluí lo que sería el costo de mano de obra, en base a lo que gana la persona y llevándolo a horas de trabajo, y aún así, comprarla no te ahorra nada. Esto sin contar que cuando la haces tú te aseguras de que cumpla con la higiene necesaria que te evita otros gastos relacionados a la salud.
No. 3: Identifica los días de especiales de los supermercados
Parte de la estrategia de los supermercados es poner especiales con temas específicos como: vegetales, pescados y mariscos, carnes rojas, etc. Estos días por lo general promocionan descuentos especiales a quienes adquieran artículos dentro de la categoría mencionada.
Es importante resaltar que este tipo de descuentos están vinculados con membrecías o programas de fidelización de la misma empresa. Por lo tanto, tendrías que suscribirte a ellos para obtener los beneficios. No obstante suelen ser libres de costo.
Este tipo de acciones, si lo llevas a cabo de manera estratégica, pueden representar un ahorro entre el 15% y 25%, en otros casos pudiera ser un poco más.
No. 4: Presupuesta un monto a alimentación
Una de las cosas que te ayudan a no gastar de más es saber qué y cuánto tienes que gastar. Para esto está el presupuesto; en donde especificas el monto destinado a alimentación.
Para llegar a este número mágico, tienes que ver cuáles serían tus consumos en comida. Es decir, evaluar lo que usualmente ingieres diario, semanal o mensual, para que puedas tener una idea más acabada de el gasto que tendrías que hacer, y así puedas apartar o prepararte para este gasto.
Toma en cuenta que ese número que logres identificar te servirá como parámetro de compras, pero no es una camisa de fuerza. Se supone que debes ajustarte a ese dígito, pero pudieras ser flexible. Es posible que durante una compra «X» encuentres una oportunidad, aunque no soy de los que creen en asumir ofertas no planificadas, sin embargo, pienso que no todo tiene que ser tan estricto. Lo primordial es que definas un monto y te ajustes a él para puedas ahorrar en la comida que consumes.
Conclusión
Ahorrar dinero en la comida está relacionado a las decisiones de consumo. Pero más que todo a la salud. Cuando tienes como prioridad estar sano, por defecto, entras al mundo de ahorrar dinero en comida.
No obstante, esta decisión de comer sano tiene que auxiliarse de estrategias, que te permitirán materializar dicho ahorro:
- Visita a tu médico.
- Evita comprar comida en el trabajo.
- Identifica los días de especiales en los supermercados.
- Presupuesta un monto a alimentación.
Con estas cuatro pautas iniciarás un proceso de saneamiento, tanto de tu salud, como de tus finanzas sabiendo cómo ahorrar en la comida.
Si esta entrada te ha servido como referencia para tener una vida saludable y ahorrar dinero, entonces el objetivo se logró. Y si entiendes que le puede servir a otra persona, entonces te invito a que comentes y compartas. Tus opiniones y aportes son de gran importancia para nosotros y quisiera leerte y que sirvas como canal extensivo a otras personas.
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